Entre las conversaciones que se tienen durante los partidos del Real Club Recreativo de Huelva, surge la pregunta acerca del destino que corrió La Garra Onubense, una de las Peñas Recreativistas más míticas y animosas que jamás se ha visto en Huelva, respetando y considerando siempre el poderío y la fuerza del Frente Onuba, así como la alborozo y el desparpajo del Sector Helicóstero, entre otros grupos de valientes anónimos.
Cuántas veces nos hemos preguntado qué fue de aquella mítica pancarta que reinó durante varias temporadas en el Gol Norte del Viejo Colombino, y que tantas voces aseguran que fue enterrada bajo los escombros del que fue el segundo Templo del Recreativismo. En aquel alargado cartel de color blanco y letras azules destacaba un avezado buitre, el cuál posaba grandioso y arrogante, a la vez que humeaba de un enorme canuto y pisaba un balón de fútbol con una de sus garras. Afortunadamente, todos estos detalles aún perduran en la memoria de aquellos que tuvimos la dicha de disfrutar de una de las épocas doradas de nuestro Recre.
Y pensando tantas veces en aquel Buitre del Viejo Colombino, principal icono de La Garra Onubense, podemos llegar a la conclusión de que sólo era eso, un símbolo, un emblema que desafortunadamente no ha llegado hasta los aciagos días que ahora vivimos en el Recreativismo. Sin embargo, la leyenda cuenta que, algo más de veinte años atrás, muchos jóvenes y otros no tan jóvenes del Polígono de San Sebastián y otros barrios de Huelva, comenzaron a concentrarse en la Plaza Houston para amenizar la previa de los partidos del Recre; y, posteriormente, una vez en el Gol Norte, se iban reuniendo alrededor del más rapaz de todos los recreativistas, con el objeto de disfrutar del histórico juego del Decano del Fútbol Español y cantar los goles en aquellas jornadas de fútbol, muchas de las cuáles se convirtieron en auténticos días de gloria para la apasionada afición de la Vieja Tartessos.
Al día de hoy, tenemos la certeza de que los miembros de La Garra siguen acudiendo cada domingo hasta el Nuevo Colombino para animar al Real Club Recreativo de Huelva, aunque, eso sí, repartidos por el graderío. De su continuidad o no como Peña Recreativista tenemos completo desconocimiento, pero la verdad es que es una lástima no poder ver ya en el Colombino ninguna referencia a aquel colectivo, dentro del cual fui creciendo como recreativista. Y aunque los años no pasen en balde, estoy convencido de que una comparecencia de unión entre sus antiguos miembros siempre sería positivo para la Hinchada Albiazul, la cual se vería muy fortalecida con un posible renacimiento de La Garra Onubense.
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